Dado que los procedimientos cosméticos y las cirugías se han convertido en parte de los regímenes de belleza de muchas personas, resulta difícil recordar un momento en el que este tipo de método se consideraba poco común o no aceptados. Hoy te contamos acerca el auge de los procedimientos cosméticos y cómo la normalización de esos tratamientos ha llevado a una revolución dentro de la industria cosmética.
¿Cuándo comenzaron las cirugías cosméticas?
Los procedimientos cosméticos se realizaron por primera vez alrededor del siglo XVI para corregir desfiguraciones, y hace unos 200 años, en 1817, John Peter Mettauer realizó la primera cirugía estética. En 1962, Timmie Jean Lindsey se convirtió en la primera mujer del mundo en recibir un aumento de senos o levantamiento de mamas con implantes de silicona incluidos.
Desde las décadas de 1970 y 1980, las cirugías cosméticas electivas se volvieron más regulares, con diferentes tendencias corporales y desarrollos tecnológicos que evolucionaban junto con las cirugías más populares. Desde entonces, se han realizado millones de procedimientos de este tipo.
Desarrollos en cirugías plásticas
En 2017, se pudo notar cómo la edad promedio de las mujeres sometidas a cirugía estética había caído por debajo de los 40 por primera vez, según una investigación del Centro de Cirugía Plástica y Cosmética Facial Avanzada en Londres. La investigación también reveló que la edad promedio de los hombres también se redujo de 47 a 45, lo que indica que la tendencia a realizar cirugías cosméticas a una edad más temprana abarca tanto a hombres como a mujeres.
Entonces, ¿por qué las personas están considerando la cirugía estética a una edad más temprana?
El auge de las redes sociales en los últimos 10 años sin duda ha cambiado la forma en que pensamos sobre nosotros mismos y los demás a nivel individual, pero también dentro de la sociedad. Antes de los teléfonos inteligentes y las redes sociales, el concepto de una selfie era poco común. Sin embargo, avanzando rápidamente hasta 2014, Google informó que se tomaron 93 millones de selfies por día. La investigación ha demostrado que una de cada tres fotos tomadas por personas de entre 18 y 24 años es una selfie.
Cuando las personas se toman fotos (en un dispositivo que puede alterar su apariencia), se enfrentan a una imagen potencialmente distorsionada y pueden analizar demasiado sus propios rostros y quedar atrapados en un ciclo de intentar lograr un objetivo poco realista, a menudo con y procedimientos costosos.
Si bien hay focos de positividad en las redes sociales, la prevalencia de estos feeds altamente curados, con rostros simétricos y estéticamente agradables a menudo filtrados y editados usando múltiples aplicaciones, ha causado una disociación entre la ‘realidad’ de cómo nos vemos y lo que queremos.
Si sos de los que estás considerando un procedimiento cosmético, te recomendamos que te tomés tu tiempo antes de decidir continuar. Asegúrate de conseguir un buen centro médico como CEQ Del Plata – Cirujanos y de tener tiempo para hacer todas las preguntas que necesite para sentirse satisfecho y seguir adelante.