La artista compartió los detalles de ese apartamento en el cual residía durante su adolescencia.
Impulsada por diversas circunstancias, como la autonomía económica y una relación tensa con su madre, Ángela Torres desafió las convenciones tradicionales y abandonó el hogar familiar a una temprana edad; específicamente, se mudó sola a los dieciséis años.
En cuanto a las peculiaridades de esa etapa que desencadenó rápidamente, la cantante se expresó con gran sinceridad y habilidad narrativa en una visita a «Noche al Dente», el programa de América conducido diariamente por Fernando Dente con gran destreza y talento.
Ángela se acomodó en el salón y no escatimó detalles al explicar los motivos que la instaron a dejar atrás el calor, la comodidad y el refugio del nido materno. «Siempre tuve una personalidad muy fuerte y me independicé desde una edad muy temprana», afirmó con mucha seguridad. De esta manera, Torres describió la ubicación, la cual estaba en el elegante barrio de Palermo, al expresar: “Vivo sola desde los 16 años. Mi primer apartamento se encontraba cerca de este estudio». Una introducción que luego sirvió de base para ahondar en la decoración sumamente llamativa.
En relación a las particularidades de esa vivienda, en cuanto a la ornamentación, Ángela compartió: «El lugar era sumamente encantador, contenía elementos muy infantiles, como muñecos. Al entrar, daba la impresión de ser el hogar de una niña, y estuve acompañada en todo momento por mis amigos, quienes son como mi familia”.
Su nueva vida
En lo que respecta a la creación de un espacio sumamente lúdico, gracias a la juventud, la cantante reveló: “Inmediatamente después de mudarme, tuve la oportunidad de pasar más tiempo con mis mejores amigos, y para mí fue una experiencia realmente placentera; prácticamente, ellos vivían en mi casa, pero nuestra dinámica era muy parecida a lo que se ve en las películas de Disney».