¡Felicitaciones! Si ya tenés tu nuevo auto el siguiente paso que establece la Ley de Tránsito nacional es el siguiente: contratar un seguro automotor. Es importante que se realice este trámite antes de conducir el vehículo por primera vez ya que es obligatorio para circular con el rodado.
Pero las ofertas de póliza son muchas y la decisión no siempre es simple. De hecho, no hay un único seguro para autos recomendado sino que el ideal es el que mejor se adapte a las necesidades de cada conductor, en base a su presupuesto, modelo de automóvil, entre otras variables.
Por eso, te contamos cuáles son las claves de un buen seguro y qué puntos deberías tener en cuenta para encontrar la mejor alternativa para tus necesidades particulares al momento de contratar seguro para auto.
¿Qué tipo de seguros hay?
En líneas generales, hay 4 tipos de cobertura para automóviles.
Seguro Responsabilidad Civil
Este es el seguro mínimo que la ley establece para poder circular con el rodado. Cubre daños ocasionados a terceros -transportados y no transportados- únicamente cuando los daños sean responsabilidad del asegurado.
Contra terceros básico
Además de la responsabilidad civil, brinda cobertura parcial sobre los daños que otros pueden ocasionar en tu vehículo, como robo, rotura de cristales e incendios.
Contra terceros full
Es similar al anterior, pero en este caso la cobertura es más amplia. Es decir, cubre un mayor porcentaje de daños en caso de accidentes, robos e incendios.
Seguro contra todo riesgo
Este tipo de seguro es sin dudas el ideal ya que garantiza mayor tranquilidad y cobertura no solo en caso de robos, incendio o accidente sino que también contempla casos de granizo, rotura de cerraduras, vandalismo en cristales, entre otras eventualidades. Según la póliza y si se opta por una franquicia, la cobertura puede ser total o parcial.
¿Qué tipo de seguro se debe contratar?
Según la Ley nacional de tránsito, es obligatorio contar con un seguro de responsabilidad civil -seguro contra terceros- que ofrece cobertura por daños materiales o físicos ocasionados a terceros como consecuencia de un accidente de tránsito.
Este tipo de seguro es el base. De ahí en adelante, cada uno podrá optar por ampliar la cobertura para mayor tranquilidad.
Factores a tener en cuenta
No todos necesitamos el mismo seguro automotor. Antes de seleccionar el definitivo, debemos considerar una serie de aspectos, no solo en lo que respecta a la oferta de las empresas aseguradoras sino también en todo lo relacionado a nuestro caso en particular.
Así, debemos analizar qué modelo de auto tenemos, la antigüedad, la zona por la que circula habitualmente el automóvil, dónde lo guardamos y, por supuesto, nuestro presupuesto. Por ejemplo, es importante tener en cuenta que si nuestro auto es último modelo, en caso de daños los costos de reparación serán mayores y por lo tanto, contar con un seguro con cobertura mayor será más recomendable.
Partiendo de la base de que el seguro ideal es el que nos protege contra todo riesgo, es recomendable analizar el presupuesto y la relación de calidad-precio para encontrar el que mejor se adapte a nuestras necesidades.
Por otro lado, antes de contratar una empresa aseguradora, es preferible controlar que figure dentro de las Entidades Aseguradoras de la Superintendencia de Seguros de la Nación. Algunos ejemplos son Allianz, La Caja, Sancor, Orbis, La Meridional, Integrity y San Cristóbal.
Franquicia, ¿sí o no?
Se denomina franquicia a un valor que el asegurado está dispuesto a asumir antes daños ocasionados y que contribuye a disminuir el costo del seguro. Esta es una alternativa cada vez más elegida entre los conductores, ya que cada uno puede optar por el nivel de franquicia a elegir (dentro de las posibilidades que brinde cada compañía) y encontrar así un equilibrio entre los gastos que estaría dispuesto a asumir ante un accidente y el valor de cuota mensual que puede afrontar al momento de contratar un seguro.
Sea cual sea el seguro automotor por el que cada uno se decida, recordemos con conducir con precaución y respetar las normas de tránsito es una obligación de todos los conductores.